La educación es un derecho fundamental que todo ciudadano debe recibir de forma gratuita, con calidad y libre acceso. En los últimos años, los más poderosos han querido coaptar la educación pública, imponiéndole la privatización y fomentando la mercantilización de la misma. Diversas han sido las formas de apoderarse de las instituciones públicas y desarticular los sistema de enseñanza en América Latina y el Caribe.
El sistema educacional chileno es un ejemplo de lo que en América pretenden implementar. El único objetivo es profundizar a través de la educación el sistema neoliberal. Le son impuestas cuantiosas cuotas de ingresos a los educandos, los que terminan endeudados por varios años, no existe reconocimiento ni garantía del derecho a la asociación, organización y representación de estudiantes, funcionarios, profesores y académicos en todos las instituciones educacionales, lo que atenta contra la democratización de la universidad, se limita el acceso a cursar estudios superiores, lo que priva a muchos jóvenes de ese derecho.
Los estudiantes exigen al Estado aumentar los recursos para la educación, abaratar los precios del transporte público para este sector, mejorar las condiciones de los créditos que deben pagar los universitarios para financiar sus carreras, reducir las desigualdades en las escuelas públicas y no promover la privatización.
Estas y otras son las demandas que por más de dos meses el sector estudiantil ha estado haciendo a su gobierno. En su empeño ha protagonizado históricas movilizaciones que han marcado el camino de lucha de todo un pueblo. Las manifestaciones no son solo de los estudiantes, hoy se evidencia un interés nacional en defensa de las demandas estudiantiles.
El gobierno de Sebastián Piñeira, no ha respondido a las solicitudes de los movilizados, ha desconocido demandas tanto de los universitarios como de los estudiantes secundaristas de ese país, por lo que el llamado de las organizaciones estudiantiles y en especial de la CONFECH es a mantenerse en pie de lucha, a no descansar mientras el sistema educacional responda a los intereses de unos pocos. Los estudiantes han rechazado el paquete de medidas del presidente chileno y en su efecto han convocado, junto a los trabajadores, a una huelga nacional para el próximo 14 de julio.
La Organización Continental Latinoamericana y Caribeña de Estudiantes (OCLAE) en nombre de sus organizaciones miembros y asociadas, manifiesta su solidaridad y respaldo al movimiento estudiantil chileno. Convoca a todas sus organizaciones miembros y amigas a denunciar la criminalización a la que están siendo sometidos los estudiantes en sus protestas, a pronunciarse en respaldo a la huelga general convocado para el próximo jueves 14 de junio.
Secretariado Ejecutivo de la OCLAE